jueves, agosto 23, 2012

PALABRAS

Me dijiste que eras un espíritu libre, incapaz de atarte a nada ni a nadie. 
Que era muy pronto para establecer ciertas rutinas y que no estabas preparado para asumir ningún tipo de compromiso. 
Que lo importante era el cariño, disfrutar del sexo aquí y ahora, cuando nos apeteciera, sin reglas ni horarios de ningún tipo. 
Que las relaciones abiertas eran enriquecedoras y ayudan a mantener la chispa del principio y a conservar el misterio.
Sin embargo, cuando viste aquellos condones usados en la papelera de mi dormitorio, enmudeciste de repente. Se te puso la cara roja y te marchaste farfullando entre dientes dando un fuerte portazo.
Pero, ¿en qué quedamos?
¡jajajajaja!!¡

Idiota...


Ana Elena Pena ("Sangre en las rodillas")



1 comentario:

Lucia.C dijo...

¡No se puede ser mas grande!